Y van… La sentencia exonerando de responsabilidad a los asaltantes del parlamento catalán tiene bemoles. Dicen los jueces firmantes que “cuando los cauces de expresión se encuentran controlados por medios de comunicación privados resulta obligado admitir cierto exceso en el ejercicio de las libertades de expresión o manifestación si se quiere dotar de un mínimo de eficacia a la protesta y a la crítica”.
Como opiniones de esta naturaleza se vienen dando con harta frecuencia habrá que inducir que en la judicatura hay demasiados elementos indignados contra el sistema. Mal asunto cuando se trata de impartir Justicia.
Podría ser discutible el envío a la Audiencia Nacional de aquellos hechos, el acoso por parte de una horda de bárbaros al Parlament y hasta al propio presidente de la Generalitat, pero una vez asumida la denuncia lo que a los juzgadores corresponde es aplicar la ley escrita con todos los ajustes propios del caso; sin más. Ese es nuestro sistema, y no el de la common law anglosajón en el que los jueces actúan interpretando y creando jurisprudencia, es decir, juzgan y legislan a la vez. Continue Reading ▶






