Asombroso. Cuán rápido se sacuden el polvo de la trama. En una semana nadie reconoce al hombre por el que acaban de poner la mano sobre el fuego. Nada que ver con el PSOE dice la vicepresidenta Marichús que, aburrida de no hacer nada donde la pusieron, quiere dedicarse a Andalucía. Continue Reading ▶
La barrabasada
Felipe González, expresidente de la nación, 83 años, fue el joven laboralista que transformó un vetusto PSOE anclado en la memoria guerracivilista de finales de los setenta en el partido socialdemócrata de masas que culminó la transición gobernando durante más de una década. Continue Reading ▶
Sánchez y su grímpola anti OTAN
Tenía que adornarse con algún malabarismo para distraer la atención. Y se fijó en la OTAN; nada hay mejor. Estamos demasiado lejos de Putin como para cobrar conciencia del riesgo, sentir el miedo que ha impulsado a sus vecinos a sacudirse el 5% de sus recursos por lo que pueda pasar. Continue Reading ▶
Las riendas del poder
Dice el capitán que no puede soltar las riendas del poder. Literalmente: “Entregar las riendas del país al PP y VOX sería una tremenda irresponsabilidad”. He ahí la razón de su sacrificio, auténtica inmolación. Atado de pies y manos a su misión progresista, presume de acaudillar el último partido socialista europeo. Continue Reading ▶
El capitán tiene hambre
En el ocaso del sanchismo todo sigue siendo insólito. Ríase usted de los diálogos publicados el jueves pasado entre los peones del Capitán. Ciertamente, muy flojo de memoria y una conciencia atrofiada hay que tener para ahora repudiar a Koldo, guardián en su día de los poderes para las primarias que le prestó la militancia.
“Ese no es de mi confianza” dijo queriendo marcar diferencias entre este sinvergüenza y los otros dos, los secretarios de organización del partido “limpio”. ¿Limpio, si baboseaban ante la pasta ordeñada a la sombra de mascarillas sanitarias, obras públicas, o quiebras empresariales? ¿Limpio enchufando putas en instituciones púbicas, o cuando se las disputan sin saber dónde pasar la noche llegan a un amistoso, “o quédate las dos, y a tomar por el culo”?
Por cierto, ¿serían de esta ralea las conversaciones que los cuatro mantuvieron en el Peugeot durante el año de la reconquista de las bases? ¡Qué nivel tenemos al frente de la nave!
El Capitán está por encima de las tormentas, su misión es llevar hasta el final el gobierno de coalición progresista. El caso es que nos saldrá carísimo.
Los chantajistas que le tienen cogido por sus debilidades nunca hallarán mejor momento y escenario para exprimir la ubre pública por exhausta que esté. Entre las exigencias de la defensa y la carencia de presupuestos, el Capitán tirará de la deuda con más fervor de lo que viene haciéndolo.
Y, naturalmente, si falta hiciera, el Museo del Prado se instalaría al pie del Tibidabo, o del monte Gorbea, depende del empeño y votos que pongan sobre la mesa los golpistas catalanes o los exterroristas vascos. Tan difícil es lo de la amnistía, y ahí está.
Pero quizá no pueda alargar su salvífico mandato como prevé; suponiendo que realmente así lo piense. En un tipo que hace un arte de la falacia, es posible que se sienta amenazado por una investigación sobre la financiación ilegal del partido, punto éste sobre el que pocos dudan.
Procedimientos español y europeo, dado el origen de los fondos asaltados. Lo de la auditoría, aprobada ayer precisamente, y a continuación otra independiente y las que hagan falta porque desde Filesa el “partido limpio” aprendió a manejarse en a, en b, en c, y hasta desde Venezuela.
Realmente no hacen falta más capítulos de esta saga que ha dejado la de Santiago Segura y su Torrente el brazo tonto de la ley en una secuela de Alicia, o de Blancanieves y sus enanitos. Muy negro tiene que verlo el Capitán para desenvainar la cimitarra contra Feijóo, Ayuso y Moreno. Y qué decir de los ditirambos dedicados a la gestión del gobierno progresista, el mejor en la historia democrática de España, cercado por la peor oposición de la misma historia.
En todo caso, muy negro ha de ver el horizonte. Cerró su comparecencia diciendo que ya estaba bien, que eran la cinco y tenía hambre. Y tras saciar su apetito, desmaquillarse y hacer como que hablaba con su vicepresidente segunda, se aprestó a lo suyo: restaurar el muro y rodearlo de tierra calcinada.
Leave the first comment ▶El fiscal, Pumpido y la línea Maginot
La mayor línea de resistencia construida en Europa la armaron los franceses, la ligne Maginot, en los años 30 del pasado siglo. Cien años después, un tal Pedro Sánchez ha replicado la iniciativa tomando la Fiscalía, el Tribunal Constitucional y la Abogacía del Estado como cosa propia… por lo que pudiera pasar. Y está pasando.
De la Maginot quedan los restos de búnkeres, hoy conservados para entretenimiento turístico; a pesar de los planes, años y tres mil millones de francos invertidos en su construcción Francia sucumbió.
Hoy y aquí, la resistencia berroqueña del fiscal general tiene el valor de la primera fortificación en un campo de batalla. Ejemplar personaje García Ortiz que no hizo más que lo que debía hacer, repite la salmodia el coro de cantamañanas que, en defensa de Cerdán, de Begoña, antes de Ábalos, etc., inmolaron sus manos hoy abrasadas por el fuego de los hechos.
El Fiscal resistirá mientras nuevos hechos no den al traste con su numantino empeño. La inconsistencia de su situación le aboca al papel de muñeco del pimpampum arrastrado por los vientos de un papel o la grabación comprometedora de cualquier ex camarada de toda confianza.
A su favor tiene el lento tempo de la justicia; en contra, el inicio del desmoronamiento del aparato sanchista del cual forma parte sin vergüenza alguna. Cuando ayer se atrevió a decir que su deber es resistir para defender la independencia de la fiscalía, alcanzó las más altas cotas de inverecundia.
A Conde Pumpido le llegará su némesis desde el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Su reciente informe sobre la inminente ley de amnistía es demoledor, nuestro Tribunal Constitucional está a punto de prender un puro con sus hojas, pero de las brasas surgirán las llamas de una sentencia más explícita. Lo de la “autoamnistía” no es broma tolerable en los Estados de Derecho.
Por otra parte, el hecho de que alguna de las víctimas del aparato sanchista renuncie a ser defendida por la Abogacía del Estado, como se les ofreció, revela el respeto que merece el, en otros tiempos, ilustre cuerpo de funcionarios.
Todo cuanto el autócrata toca termina convertido en víctima propiciatoria de su resiliencia. Víctimas hasta ahora sumisas, como las vírgenes al sacrificio en las tragedias griegas, están comenzando a despertar a la pedestre realidad: ¡el caudillo está desnudo!
Leave the first comment ▶