Lo que viene ocurriendo es difícil de soportar estoicamente. El asalto al poder de la tropa antisistema subida a lomos del socialismo nacional está dando de sí todo cuanto cabía suponer, pero más rápidamente de lo previsto. La pacífica convivencia de estos cuarenta años democráticos podrá terminar siendo un recuerdo nostálgico.
No hay palo que no toquen ni perno sobre el que no apliquen el destornillador, y así las crujías comenzarán a tambalearse sobre nuestros proyectos, nuestras aspiraciones, nuestras cabezas.
Ni al que asó la manteca se le ocurre lo de la bilateralidad con el xenófobo racista que preside la institución autonómica catalana. Lo intentaron sus predecesores, estuvieron a punto de escalar ese peldaño, pero el sentido común acabó aguando ese remedo de equivalencia entre poderes. Ha tenido que llegar este zascandil para darle aire a la cometa cuatribarrada. Continue Reading ▶