La realidad acabó aplastando las buenas intenciones de los mentores de Ciudadanos: Sánchez ha entregado su futuro a Iglesias. Lo confirmó tajante, aquel abrazo del 12 de noviembre rubricaba un matrimonio como los de antes, “hasta que la muerte os separe”. Y ante tal manifestación de indisolubilidad, no caben componendas. Casado demostró por qué no podía apadrinar el engendro sanchista-comunista y Arrimadas volvió a ver las cosas como son.
Sánchez seguirá pues adelante, incluso con faroles. No necesita gastarse mucho más con los sediciosos y secuaces; ellos saben qué es lo que le conviene. La coalición llamada de progreso es la llave capaz de abrir todas las puertas, desde las del poder judicial y la fiscalía general hasta las de la prisión Lledoners.
En este teatro del absurdo con que el sanchismo degrada la política nacional, brillaba ayer el parlamento de la portavoz Lastra reiterando por enésima vez que populares y ciudadanos serán los culpables de que Sánchez acabe en manos de los independentistas. Continue Reading ▶