No tiene un pase el espectáculo que ante la nación entera vienen celebrando en Madrid los dirigentes populares. Grotesco como lo eran los festivales taurinos del bombero o los enanitos toreros y otras perversiones anexas a la fiesta nacional.
Parece como si el populismo se hubiera encarnado en quienes, para muchos, suponían la única esperanza cierta para cerrar cuanto antes el paréntesis con que el sanchismo pasará a la pequeña historia de estos años. La irresponsabilidad de los concernidos en esta astracanada resulta tan difícil de comprender como la que vive todo el equipo gubernamental presente. Continue Reading ▶






