Campañas y voto útil

Vidiera en Hamelin

Vidiera en Hamelin

Decía Balbino que la democracia nunca sería un buen sistema de gobierno mientras no se implantara el voto negativo: voto para que no gobierne fulanito de tal. Intuía que pasados los años, quien más fuerte chiflara conduciría a los votantes hasta su exterminio, como las ratas y niños, de Hamelin acabaron ahogados en el río Weser.

Lo de aquel flautista de la leyenda recogida por los Grimm tiene bastante que ver con las campañas electorales de nuestro tiempo. Cada quien con su melodía, los candidatos tratan de llevarse el elector al agua con un puñado de artificios, cada vez más elementales pues no sea que llamen la atención y alguien se ponga a pensar, como el ratón de la copla de Serrano. Que eso es precisamente lo que la mayoría de los contendientes tratan de evitar: el pensamiento crítico.

Canta Ismael Serrano en Rebelión en Hamelin que los ratones se lanzaban a la nada tras la música hechizada de un flautista hasta que

Se detuvo en el camino
Un ratón a preguntarse
Por qué seguir tan campantes
Aquel son tan asesino
”.

La consecuencia fue revolucionaria: las ratas votaron no y el flautista terminó en el río.

Hoy y aquí el voto negativo lo ponen los propios candidatos con sus vetos y descalificaciones. El “vota contra Rajoy” fue la almendra de las campañas de socialistas, podemitas y ciudadanos hace seis meses. Pero como los alertados por el ratón del cantautor pecero, bastantes millones de ciudadanos se saltaron el cordón sanitario envuelto en el celofán del cambio, el progresismo y eso tan extraño como de moda que llaman transversalidad.

Campaña electoral y reflexión es un preclaro ejemplo de  oxímoron; tal vez por ello la reflexión se guarde para la última jornada cuando ya está vendido todo el pescado. Y sin embargo claro que hay elementos que dan pie para cuestionarse determinados mensajes y actitudes, como el reto de los podemitas para que los demás adelanten con quién piensan o quisieran alcanzar una mayoría de gobierno. Pero más relevante aún es el silencio como respuesta con que la inquisitoria es atendida por los interpelados, socialistas y ciudadanos, hasta ahora asociados consigo mismos.

Extrañas maniobras diseñadas exclusivamente en términos de poder; y no en poder para hacer qué, sino en el poder por el poder.

Ante un horizonte tan romo como se adivina y vivida la experiencia reciente, los comicios del próximo junio pueden ser dirimidos por algo tan elemental como el voto útil. Demasiadas dificultades está apuntando la realidad actual como para que la sociedad española aparque determinadas cuestiones, incluso importantes algunas, mientras sienta el riesgo de perder lo mucho o poco que ya tiene. Con las cosas de comer no se juega, amigo.

Compartir entrada:
Posted martes, mayo 17th, 2016 under Política.

Leave a Reply