Bachelet, primera señal

Bachelet y los indígenas

Bachelet y los indígenas

Leo en infolatam.com que la flamante presidente chilena comienza a escorarse hacia el otro lado; que pone en cuestión la Alianza del Pacífico que levantaron con Chile México, Perú y Colombia, las naciones gobernadas hoy por la democracia sin adjetivos.

Sería lamentable para su país, y quizá para el conjunto del continente, desarbolar el único proyecto de integración latinoamericana equivalente al nacimiento de la UE

Los cuatro mayores países de la cornisa americana del Pacífico decidieron, en abril hará tres años, levantar un espacio común para avanzar hacia la libre circulación de bienes y servicios, personas y capitales. Costa Rica y Panamá son observadores en trance de adhesión. Proyectada hacia el exterior, y singularmente hacia Asia-Pacífico, hoy tiene veintinueve países como observadores.

Toda una plataforma de articulación política a integración económica para tratar de alcanzar mayores niveles de bienestar a través de la inclusión social y la superación de desigualdades socioeconómicas entre sus ciudadanos.

Cuando Bachelet señala que “Chile en los últimos años ha perdido presencia regional y se ha privilegiado una visión economicista”, y que bajo su mandato “podemos reencontrarnos como viejos vecinos para reimpulsar una Latinoamérica integrada”, está diciendo una de estas dos cosas: o nada –lo más probable-, o que le gusta el ALBA, el otro proyecto regional que pusieron en marcha Fidel Castro y Hugo Chávez, basado en fondos de compensación, al que se adhirieron Bolivia, Nicaragua, Ecuador… “los gobiernos populistas y el comunismo monárquico de Cuba”, en palabras del expresidente Sanguinetti.

Más que con cubanos y venezolanos Bachelet tiene un fuerte compromiso con Brasil, el Brasil de Lula, quien en las últimas elecciones presidenciales chilenas se plantó en Chile para mostrar su “profunda admiración por la compañera Bachelet”. También querrá estar a buenas con su colega Fernández, y las rémoras incorporadas a su Nueva Mayoría tirarán de ella, si falta hiciera, para estrechar lazos con sus compañeros bolivarianos, con los caudillos de las democracias con apellidos que Chávez venía nutriendo enchufados a sus pozos petrolíferos.

¿Llegará la República de Chile a apellidarse Plurinacional, como la Bolivia de Morales? Ayer en una de las primeras manifestaciones de los nuevos intendentes, el gobierno pidió perdón en nombre del Estado al pueblo mapuche “por el despojo de sus tierras”…

Como la mentira, lo de las visiones economicistas, argumento crítico de la izquierda universal, tiene muy corto recorrido. Basta enfrentar los resultados de esas políticas con las del otro lado para concluir cuál de las dos es la vía segura hacia la integración real y el bienestar de los pueblos. Chile, gobernado por el centro izquierda 20 años y 4 más por la derecha, ha venido mostrando el camino. Desandarlo y confundirse en los problemas del vecindario sería un error.

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Posted jueves, marzo 13th, 2014 under Política.

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