Ahora a golpe de entrevistas, después de los golpes institucionales que perpetró en junio, el primer ministro que juega a presidente de una república que no existe, se enfrenta a la demoscopia como si las encuestas fueran la causa de sus males.
El tipo, por no saber, confunde causa y efecto, y así carga contra la demoscopia, el efecto que refleja la causa de la oscura realidad de su ocaso. Y en ese desbarre que lo está convirtiendo en muñeco roto, saca a la luz extravagantes espectros como los poderes ocultos que arman a la derecha para cargarse la histórica misión del progresista irredento que encarna. Continue Reading ▶