El fiscal, Pumpido y la línea Maginot

Búnkeres restos de la línea Maginot francesa.

La mayor línea de resistencia construida en Europa la armaron los franceses, la ligne Maginot, en los años 30 del pasado siglo.  Cien años después, un tal Pedro Sánchez ha replicado la iniciativa tomando la Fiscalía, el Tribunal Constitucional y la Abogacía del Estado como cosa propia… por lo que pudiera pasar. Y está pasando.

De la Maginot quedan los restos de búnkeres, hoy conservados para entretenimiento turístico; a pesar de los planes, años y tres mil millones de francos invertidos en su construcción Francia sucumbió.

Hoy y aquí, la resistencia berroqueña del fiscal general tiene el valor de la primera fortificación en un campo de batalla. Ejemplar personaje García Ortiz que no hizo más que lo que debía hacer, repite la salmodia el coro de cantamañanas que, en defensa de Cerdán, de Begoña, antes de Ábalos, etc., inmolaron sus manos hoy abrasadas por el fuego de los hechos.

El Fiscal resistirá mientras nuevos hechos no den al traste con su numantino empeño. La inconsistencia de su situación le aboca al papel de muñeco del pimpampum arrastrado por los vientos de un papel o la grabación comprometedora de cualquier ex camarada de toda confianza.

A su favor tiene el lento tempo de la justicia; en contra, el inicio del desmoronamiento del aparato sanchista del cual forma parte sin vergüenza alguna. Cuando ayer se atrevió a decir que su deber es resistir para defender la independencia de la fiscalía, alcanzó las más altas cotas de inverecundia.

A Conde Pumpido le llegará su némesis desde el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Su reciente informe sobre la inminente ley de amnistía es demoledor, nuestro Tribunal Constitucional está a punto de prender un puro con sus hojas, pero de las brasas surgirán las llamas de una sentencia más explícita. Lo de la “autoamnistía” no es broma tolerable en los Estados de Derecho.

Por otra parte, el hecho de que alguna de las víctimas del aparato sanchista renuncie a ser defendida por la Abogacía del Estado, como se les ofreció, revela el respeto que merece el, en otros tiempos, ilustre cuerpo de funcionarios.

Todo cuanto el autócrata toca termina convertido en víctima propiciatoria de su resiliencia. Víctimas hasta ahora sumisas, como las vírgenes al sacrificio en las tragedias griegas, están comenzando a despertar a la pedestre realidad: ¡el caudillo está desnudo!

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Posted sábado, junio 14th, 2025 under Política.

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