Lo anuncié hace días: el doctor cum fraude comenzará la campaña travestido de Guardia Civil, o de lo que haga falta para hacer como que hace en defensa del interés nacional. Dicho y hecho. Sin venir a cuento o, por mejor decir, porque mañana comienza la campaña electoral, el sanchismo hace como que pone cara feroce a los golpistas y saca a la calle un decreto ley contra la república virtual catalana. Toma del frasco: república virtual.
Pero de tal esfuerzo legislativo para defender la Nación que, por cierto, cuelgan del decreto que aprobó la Estrategia de Seguridad Nacional 2017, gobierno popular a la sazón, nada se infiere que pueda afectar de aquí a un mes al golpismo rampante que practican las autoridades de la comunidad catalana.
Al dar a conocer el inicio de las hostilidades contra los Puigdemont, que sigue en Bélgica hartándose de mosselen met friet, Torra, que sigue en la Generalitat, Torrent, siempre al frente del Parlament y tantos más agentes del secesionismo, la vicepresidenta Calvo dijo que el propio Presidente llevó “el mismo en mano” el real decreto-ley al Consejo.
De su calidad y sosegado estudio, virtudes precisas ambas antes de dar paso tan fundamental para terminar con el golpismo catalán, da meridiana idea el encabezamiento del comunicado oficial del Gobierno, que textualmente dice:
“El Consejo de Ministros aprueba el Real Decreto-Ley de seguridad en materia de Administración Electrónica, contratación de las Administraciones Públicas y Telecomunicaciones.
31 de octubre de 2019.- El Consejo de Ministros ha aprobado hoy el Real Decreto-Ley de seguridad en materia de Administración Electrónica, contratación de las Administraciones Públicas y Telecomunicaciones por el que se establecen medidas urgentes por razones de seguridad en materia de Administración Electrónica, contratación de las Administraciones Públicas y Telecomunicaciones.”
¿Queda claro o será necesario reiterar de lo que se trata? De su contenido sólo se sabe que tiene seis artículos, una disposición adicional, tres transitorias y tres finales. ¿Estará definitivamente escrito o esperarán a que pase el puente?
Naturalmente, la pobre señora Calvo que hacía de portavoz, Celaá ha debido de coger miedo a un nuevo expediente de la Junta Electoral Central, no atinó a señalar ni una sola causa que justificara la urgencia para poner en marcha las normas en “materia de Administración Electrónica, contratación …”. Con lo fácil que lo tenía diciendo, tricornio en mano, “señores entramos en campaña, ¿es que no se han enterado; qué más motivos necesitan?».
Como la cosa no da de sí más de lo que a primera vista pudiera parecer, Sánchez activó nuevos correos al TC para que advirtiera la contumacia de los golpistas, y anunció que a partir de ahora las fuerzas del orden serán defendidas por la Abogacía del Estado, el brazo jurídico que el Gobierno utilizó para rebajar a sedición la calificación de lo que antes calificó de rebelión. ¿Cuál será la próxima?
En todo caso, nada de lo acordado tendrá vigencia antes del 10 de noviembre. ¿Qué más da si de lo que se trata es de una defensa virtual de la Nación?
Independencia off-line, independencia on-line… Y éste era el Presidente que sabía inglés, ¿cuántas tonterías más habrá que oír al doctor cum fraude que pretende gobernarnos?