Tiene bemoles. Hay que ser como realmente son para montar un diario en la red, “Versión original”, con el que reprender, corregir, censurar y demás artimañas de las dictaduras fascistocomunistas, a los medios informativos.
Carmena es un puro mascarón de proa; con la contemplación de Carmona y sus concejales socialistas, en el consistorio madrileño manda Podemos. Y así son: no dejemos impunes las críticas; marquemos a quienes osen fiscalizarnos; cuando el poder se toma, se toma y lo demás son coñas burguesas.
Y la cosa ya pasa a esperpéntica cuando el secretario de organización del partido de Iglesias dice que mandan en el ayuntamiento madrileño “porque es el programa que han votado los ciudadanos de Madrid”. Más que bemoles, hay que tener un par como los del caballo burgalés del Cid para quedarse tan ancho tras decir tal barbaridad.
Pero si les votó un 31% siendo la segunda lista, a cincuenta mil votos de distancia de los populares; si frente a los 519 mil votos que representan en el salón de plenos, se sientan enfrente 998 mil más del resto de los partidos allí presentes… En fin.
Como no es hazmerreir menor la pretendida equidistancia entre populares y socialistas de que presumen los Ciudadanos. Recuerda a lo del paso entre Escila y Caribdis que Homero cuenta en su Odisea. Circe advirtió de los peligros del estrecho advirtiendo a Odiseo de que navegara más cerca de Escila que de Caribdis, porque si Escila devoraría a seis de sus hombres, los remolinos de Caribdis se tragarían la nave entera. ¿Tendrán claro los chicos de Rivera quién es quién en la realidad política nacional?
Eso de que a la hora de pactar serán igual de duros con unos y otros es una solemne bobada que se tiene en pie mientras los grandes partidos sigan sin creerse sus propias capacidades y principios.
De los populares, ya se sabe casi todo. Entre los socialistas la sombra de aquel Zapatero sigue siendo demasiado alargada. Ayer la diputada González daba una muestra de sublime coherencia cuando tras afirmar, y con razón, que “los grandes avances de este país han sido precisamente por los acuerdos entre partidos” aseveró que tienen dos líneas rojas muy claras: no pactarán con Podemos ni con el PP.
Pero ¿en qué país vivimos?