Reverdece una de las últimas ocurrencias legadas por el gobierno Zapatero: sacar los huesos de Franco de la basílica de Cuelgamuros. Fue el último informe emitido por el último dictamen de la última comisión de expertos creada por el actual vocal del Consejo de Estado. Al parecer la Conferencia socialista en la que Rubalcaba seguirá toreando al partido, ahora con Odón Elorza de sobresaliente, no tiene nada mejor que poner sobre el tapete. Hay que tener lo que hay que tener para no cejar en el empeño de seguir acumulando tonterías sin sentido cuando se cumplen dos años de la pérdida de la Moncloa. Largas vacaciones, como si el país fuera el de las maravillas en que jugaba Alicia; o mejor el mundo del otro lado del espejo.
Dodgson, el matemático británico que firmaba como Lewis Carol, en su segundo cuento puso a Alicia en una suerte de mundo al revés, haciéndola pasar a través del espejo en el que se reflejaba su estancia. Y allí, donde los libros sólo se podían leer en la imagen que el espejo devolvía, se sintió participando en un ajedrez viviente sobre el inmenso tablero que ocupaban figuras un tanto extrañas… hasta que despertó de la ensoñación y con cierta angustia preguntó a su gatito “¿quién fue el que soñó todo esto?… Tuve que ser yo o tuvo que ser el Rey rojo a la fuerza. ¡Pues claro que él fue parte de mi sueño!, pero también es verdad que yo fui parte del suyo”.
Llegará el día, y ojala pronto, en que los actuales mandamases socialistas despierten del largo sueño en que han estado ocupados mientras buena parte del resto del país, incluida la mayoría de sus votantes, se deslomaba para que los inversores del exterior volvieran a depositar aquí un poco de confianza.
Está por ver cuándo y quién acabe alzándose con el santo y la limosna. Pero a buen seguro que quien sea habrá de traspasar de vuelta ese espejo de la memoria histórica y otras desventuras tras el que se perdieron las Rodríguez, Valenciano y otras oxidadas figuras como los Elorza, Jáuregui y esos pequeños caudillos regionales empeñados en perder elección tras elección con el mejor de sus afanes en Castilla y León, Valencia, Madrid, Galicia, Cataluña…
Por cierto, ¿tendrá algo que decir la Conferencia programática del PSOE sobre Cataluña? ¿Y Susana Díaz? Tal vez se limiten a organizar el traslado de los huesos del general hasta el panteón familiar en el cementerio de El Pardo. Pocas cosas más relevantes en que ocuparse el primer partido de la oposición.