El titular de la Corona recibió ayer el aplauso más prolongado que recuerdan los escaños del Congreso. Diputados y senadores, gobierno y representantes de otras instituciones hicieron explícito reconocimiento de gratitud al Rey; su mensaje del día 24, sólo tres días antes, fue así ratificado por la inmensa mayoría de los representantes del común. Las excepciones corroboraron la autenticidad del reconocimiento; la unanimidad suele ser mala acompañante, impide la reflexión autocrítica. Algo pues que agradecer a los comunistas y a la renuente lideresa que se mantuvieron firmes mientras el resto batía palmas agradecidas.
Las ausencias de los radicales vascos y catalanes revelan cosa distinta. La versión dulce del MLNV probó lo que le importa de las instituciones. Ya lo hizo en la sesión de investidura, llamándose andana porque el gobierno de España no es cosa nuestra, dijeron. Su presencia en el Congreso es meramente instrumental; para ellos las cámaras no son lugares de encuentro, ni siquiera donde enfriar tensiones. Las cámaras son para ellos meros púlpitos desde los que asustar dogmatizando. La ley les garantiza inmunidad, la impunidad se la ganarán ellos mismos alegando los 300.000 votos que les respaldaron en las elecciones. Para lucirse pelean de momento el sentarse en centro del hemiciclo, nada de la última fila; que los aldeanos vean la fuerza que ya tenemos en Madrid.
Entre esta crisis, aún larvada para quienes no quiere ver, y la del paro, recesión y deuda por cifrar, qué lamentable resulta la capacidad de tantos para distraerse de las cosas que realmente importan. Mientras el paro amenaza con más fuerza, unos ponen los focos sobre el cutre juicio de Valencia y otros sobre la revisión del 11.M. Y recién salidas del Gobierno, las ex toman la iniciativa como para demostrar que le asistía algo más que la cuota. Así, la de Cultura manda un cuarto de millón de euros a la maquinaria de propaganda castrista, la de Sanidad se enfada con su sucesora por culpa del machismo, y la de Defensa sigue picoteando con el twiter sobre los compromisarios del Congreso socialista.
Por cierto, ¿se habrá enterado Chacón de que Prisa sigue adelante tras renovar ayer vencimientos de su deuda? La refinanciación le da oxígeno cuatro años más, hasta septiembre de 2015, hasta las siguientes elecciones generales. ¿Estaría esperándolo Rubalcaba para ofrecerse a mandar en el partido socialista?
El núcleo duro del PSOE no dispone de otra tribuna para remediar el desastre en que se debate el partido. El felipismo no puede permanecer de brazos cruzados ante el espectáculo abierto por chacones, garcíapages y rubalcabas, versión posmoderna de los príncipes cristianos del XVI. Quizá ahí radique para algunos el valor oculto de esta empresa capaz de encontrar respaldo en medio de este secarral crediticio.
Me estaba preguntando porqué tan prolongado aplauso al Rey, si su discurso es igual que el de otros años. ¿Cuál es la novedad? No lo entiendo.
No fue el mismo discurso de otros años; ni la fuerza de convicción que trasladó, ni las circunstancias objetivas de estos días. Pienso que Diputados y Senadores agradecieron al titular de la Corona que estuviese precisamente donde hacía falta. Nunca falla en esto. Fue un excelente mensaje. Lo añado en el comentario correspondiente, más arriba, por si no pudo verlo el día 24.
Gracias por su atención.